Asia y el Pacífico

Leer más sobre el trabajo de promoción basado en datos del socio de EM2030, ARROW, y sobre el desempeño de la región de Asia y el Pacífico en el Índice de Género de los ODS.

Asia-Pacific Resource and Research Centre for Women (ARROW), una organización regional de mujeres sin fines de lucro con sede en Kuala Lumpur, Malasia, se esfuerza por permitir que las mujeres sean ciudadanas iguales en todos los aspectos de sus vidas, garantizando que se logren su salud y sus derechos sexuales y reproductivos.


Lea más sobre el trabajo de promoción basado en datos de ARROW.

Sobre la igualdad de género en Asia y el Pacífico:

Puntaje del índice en 2020: 67,7

Puntaje del índice en 2015: 65,5

Estado: “Algún progreso” desde 2015 y puntaje general “bajo”

Resultados

La región de Asia y el Pacífico, que obtuvo un puntaje promedio de 67,7 (“bajo”), solo ha registrado “algún progreso” en cuanto a igualdad de género con un aumento de 2,2 puntos desde 2015. Países como Nepal (con un aumento de 6 puntos), Tayikistán (5 puntos) y Camboya (5 puntos) han liderado este progreso, mientras que Afganistán (con una disminución de 2 puntos) ha avanzado en la “dirección equivocada”.

A pesar del sólido crecimiento económico general, la región sigue luchando contra la pobreza. Se estima que, en 2019, 400 millones de personas, de las cuales dos tercios eran mujeres, vivían en extrema pobreza; estas cifras probablemente aumenten debido a la pandemia de la COVID-19. El cambio climático y la falta de infraestructura y servicios básicos también limitan el progreso en esta región tan amplia y diversa.

Asia y el Pacífico, que se caracteriza por tener marcadas diferencias intrarregionales, registró una brecha de 73 puntos en el ODS 4 de educación entre los países con mayor y menor puntaje y de 60 puntos en el ODS 5 de igualdad de género.

En cuanto al ODS 1 de pobreza, 16 de 26 países de la región obtuvieron más de 80 puntos (“bueno”) en el índice en 2020. Si bien Nepal, con un aumento de 13 puntos, y Laos, con 9, han registrado un “progreso rápido” desde 2015, países como Japón y Singapur que obtuvieron puntajes altos no han tenido “ningún progreso”.  Afganistán y Pakistán siguen siendo los países con puntaje más bajo en cuanto a este objetivo debido a la caída de puntaje en la percepción de las mujeres sobre ingresos del hogar (indicador 1.4) y, en el caso de Afganistán, en la proporción de la población que vive por debajo de la línea de pobreza nacional (indicador 1.1).

El puntaje regional del ODS 9 de innovación ha mejorado 9 puntos gracias al aumento en el acceso de las mujeres a Internet (indicador 9.3) y su mayor uso de la banca digital (indicador 9.1), a pesar de que sigue existiendo una profunda brecha digital de género en la región. Sin embargo, respecto del ODS 2 de nutrición, la prevalencia de la anemia entre las mujeres (indicador 2.3) sigue presentando dificultades, así como la inseguridad alimentaria entre las mujeres (indicador 2.2). Afganistán, con 55 puntos, y Tailandia, con 74, cayeron 11 puntos cada uno en el ODS 2 en general desde 2015, e incluso los mejores países de la región obtuvieron en 2020 un puntaje menor que en 2015.

Cuatro de los cinco países de la región que obtuvieron los puntajes más altos registraron “algún progreso” entre 2015 y 2020, a saber: Nueva Zelanda, Australia, Singapur y Corea del Sur. Japón, en el cuarto lugar, no registró “ningún progreso”. Los cinco países con menor puntaje en 2020, de menor a mayor, fueron Afganistán, Pakistán, Bangladesh e Irán.

Reflexion del Asian-Pacific Resource and Research Centre for Women (ARROW)

El Índice de Género de los ODS de 2022 indica que, si bien se han producido mejoras en determinadas áreas de la región de Asia y el Pacífico, sigue habiendo una gran desigualdad para las mujeres y las niñas en toda su diversidad. En especial, el progreso que ha registrado la región en relación con el ODS 5 de igualdad de género (con un aumento de 1,7 puntos) ha sido más lento que el promedio general (con un aumento de 4,1 puntos) entre 2015 y 2020. El progreso hacia garantizar la salud sexual y reproductiva reviste especial importancia; el acceso que tienen las mujeres a un aborto seguro y legal es tan relevante para la igualdad de género como lo es la igualdad de acceso de las mujeres a la educación, al empleo, y a alimentos y una vivienda adecuados.

El ODS 3 de salud reconoce que las diferencias en los datos sobre salud se deben a determinantes sociales, como roles de géneros, acceso a información y recursos y falta de capacidad para tomar decisiones. El ODS 3 también hace un llamamiento a reducir la mortalidad materna, pero el progreso en la región ha sido desigual: si bien la tasa media regional no registró ningún progreso en general entre 2015 y 2020, algunos países como Indonesia, Filipinas e India aún tienen tasas de mortalidad materna superiores a 70.

De todos los abortos en condiciones de riesgo que se realizan en el mundo, más de la mitad se producen en Asia, especialmente en Asia Central y Meridional. La falta de acceso a abortos seguros y legales y anticonceptivos es una de las principales causas de la elevada tasa de mortalidad materna de la región. El acceso a servicios de aborto seguro presenta un problema, incluso si se cuenta con las leyes y políticas adecuadas. Por ejemplo, en Nepal e India —los dos países de Asia Meridional que tienen leyes sobre aborto relativamente liberales—, el acceso a un aborto seguro y legal sigue siendo limitado. Una nueva ley en India amplía el acceso al aborto al aumentar la edad gestacional límite para interrumpir un embarazo de 20 a 24 semanas y eliminar el estado civil como restricción para realizar un aborto. De todos modos, la ley sigue negando la capacidad de decidir a la mujer y deja la decisión final en manos del personal médico. La salud y los derechos sexuales y reproductivos están vinculados al bienestar general de una persona; el retroceso en materia de salud y derechos sexuales y reproductivos debe considerarse un retroceso general en las cuestiones de igualdad de género que abordan los ODS.